Ana León Rubio
[ de Algeciras a Estambul ]Archivo de España
Otoño en Cuevas del Becerro
En noviembre pasé un fin de semana en Cuevas del Becerro, un pueblo de la provincia de Málaga. El otoño es un gran momento para hacer fotografías, y hay que aprovecharlo.
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- Cuevas del Becerro (Málaga)
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- Cuevas del Becerro (Málaga)
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- Cuevas del Becerro (Málaga)
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- Cuevas del Becerro (Málaga)
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- Cuevas del Becerro (Málaga)
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- Cuevas del Becerro (Málaga)
Trevélez, el municipio más alto de España
Trevélez es uno de los pueblos de la Alpujarra Granadina, situado en el Parque Nacional de Sierra Nevada y donde está situado el pico más alto de la Penísula Ibérica, el Mulhacén. Pero no es tan famoso por ser el pueblo que se encuentra en la cima, sino que, afortunadamente, lo es por su gastromía, y en concreto por el jamón que está protegido por una Identificación Geográfica Protegida por el Ministerio de Medioambiente, y Medio Rural y Marino y controlado por su Consejo Regulador.
Hasta este pueblo peregrinan los fines de semana y días festivos turistas en busca de tranquilidad, de encuentro con la naturaleza y con la gastronomía.
Castillo de Aracena, Huelva
En lo más alto del cerro en el que está situado el pueblo onubense de Aracena se encuentra un castillo que fue erigido en el sigloe XIII sobre una antigua fortaleza musulmana.
Se trata de un recinto amurallado partido en dos en su interior, con una torre del Homenaje de estilo mudéjar. El pueblo de Aracena fue creciendo hasta el valle.
Hoy en día en él se encuentra la Iglesia más antigua y emblemática de Aracena, Ntra. Sra. Del Mayor Dolor.
Para llegar hasta allí hay que subir el cerro. Desde sus murallas se pueden disfrutar de unas bellas vistas del valle bañado por olivos. A principio de primavera el olivar se encuentra salpicado por almendros en flor.
Ronda, Málaga
El lema de la oficina de turismo de esta ciudad malagueña es: “Ronda, alma de Andalucía”. En esta localidad se conserva el legado de todas las culturas de todos los siglos que han pasado por ella. Puede compararse a un pequeño frasco de perfume, donde en ella se detallan pequeñas pinceladas de todos los aromas que contiene.
Y es que Ronda es una de las ciudades más antiguas de España y donde aún quedan vestigios del Neolítico, conservándose pinturas de arte rupreste, o dólmenes de la Prehistoria más reciente.
Sin duda quedan para siempre los restos de la ciudad romana que fue y, como representación del alma de la comunidad andaluza, no olvida ni intenta disimular la importancia que cobró durante la época musulmana. Tras la Reconquista, Ronda va tomando la forma por la cual la conocemos hoy en día.
En el siglo XVIII se construyen tanto el Puente Nuevo como la plaza de toros, emblemas de una ciudad a la que llegan visitantes de todos los lugares del mundo, atraídos por la tauromaquia, Semana Santa y la artesanía.
Dicho enclave no podía estar sino dentro de la Ruta de los Pueblos Blancos y rodeado por una tierra fértil y que ha abastecido a sus ciudadanos durante toda su historia: la serranía de Ronda, de cuyos olivos se extrae el llamado oro líquido, producto insignia de Andalucía para el mundo entero.
El Tajo de Ronda, Málaga
Ronda está situada sobre una meseta y se encuentra dividida por un profundo cañón excavado por el río Guadalevín.
Dicho emplazamiento facilitó la defensa de la ciudad, su localización era estratégica.
El Puente Nuevo, que se construyó entre 1759 y 1793, une la zona antigua y la moderna de la ciudad, salvando el tajo de 100 metros de profundidad.
Se construyó con las mismas piedras del fondo del Tajo. En su interior se encontraba las dependencias de la prisión, donde hoy presta sus servicios el centro de interpretación.
Ver este gran monumento dieciochesco es impresionante, cruzarlo sin sentir vértigo al asomarse a la baranda es imposible.
Las fotos son tanto del Puente Nuevo como de las casas colgantes que se agarran a la meseta con fuerza, aunque desde el fondo del Tajo parezcan diminutas cajas de cerillas.
Mirador de San Nicolás, Granada
Siguiendo el Paseo de los Tristes se llega a una plaza. A partir de aquí se recomienda subir andando por el barrio del Albaicín hasta llegar al mirador de San Nicolás. Situado cerca de la Iglesia del que toma su nombre y que se construyó sobre una antigua mezquita, posteriormente destruida en la Guerra Civil.
Cerca se encuentra la nueva Mezquita mayor de Granada, que tiene un bello jardín.
Desde el mirador encontramos la mejor vista de la Alhambra, ya que está situada a la misma altura y no hay nada que obstaculice su visión. Al fondo se ve Sierra Nevada y hacia la derecha la Vega de Granada.
Lugar de encuentro de turistas y artistas urbanos. El mejor momento para visitarlo es el atardecer, ya que los tonos rojizos resaltan más la belleza de la Alhambra. Por la noche el mirador está poco iluminado, para que disfrutar de la fortaleza árabe iluminada para la ocasión.
Cañada de los Pájaros, Puebla del Río (Sevilla)
La Cañada de los Pájaros es la primera Reserva Natural Concertada de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía. Se trata de una superficie de 7,5 hectáreas situada cerca del coto de Doñana. Es por ello que está dentro de las rutas migratorias de aves, algunas en peligro de extinción. Un lugar de invernada y nidificación.
Hay que pagar por entrar y puede que no tengas mucha suerte de avistamiento, pero el dinero sirve para el mantenimiento de las instalaciones.
Cerro del Hierro (Sevilla)
En el Parque Natural de la Sierra Norte de Sevilla nos encontramos con Cerro del Hierro. Este Monumento Natural geológico rico en hierro, explotado como mina desde ante de los romanos. Actualmente consiste en una zona de gran valor geológico y paisajístico.
Este espacio es dedicado para hacer senderismo (con túneles, que eran las vías por las que pasaban las vagonetas que sacaban el mineral) y la escalada.
Teatro Romano de Mérida
Nos empeñamos en viajar siempre fuera de nuestro país. Si no tomamos un avión parece que no estemos haciendo el viaje que nos merecemos despúes de tantos días de trabajo a lo largo del año. Dentro del panorama cultural español está Mérida, ciudad patrimonio de la humanidad, que cuenta con un conjunto arqueológico merecedor de tal título.
Una de las joyas arquitectónicas de Mérida es su teatro romano, construido en el siglo I a. C. que tuvo en su orígenes capacidad para unas 6.000 personas. Se trata del teatro romano mejor conservado de Europa y es el único que, tras su recuperación en las primeras décadas del siglo XX, sigue siendo escenario de representaciones artísticas. El escenario cuenta con un embellecimiento formado por dos cuerpos de columnas de mármol y de estilo corintio. Esta edificación alcanza los 30 metros de altura.
En dicho teatro se celebra el Festival de Teatro Clásico de Mérida, el más antiguo de los festivales de teatro clásico que se celebra en España. Su primera edición fue en 1933 con Medea de Séneca, una versión de Unamuno.
Este año he ido al Festival y estuve en la representación de Los Gemelos de Plauto. La obra estuvo muy bien y animo a que las personas que quieran vayan el año que viene. Sólo una recomendación: no compren las entradas más baratas (12 € en 2009) porque, aunque la acústica y la visibilidad sean estupendas, los asientos no están restaurados y estar más de una hora sentado en piedras puede ser insufrible para muchos; pagando unos 5 € más se puede contar con un asiento en piedra lisa y con un cojín, lo que hace más llevadera la respresentación.
Esta foto fue tomada justo antes del comienzo de la representación. Apoyé la cámara en mis piernas, puse el disparador automático y un obturador de 1,5. Hice alguna con el objetivo 30-200mm, pero al no tener trípode no podía cuadrar bien la imagen, por lo que salvé poco de ese material.
Ana León Rubio 